Patético es el sistema educativo canario, el peor de todos los paises civilizados. Patético es ver que todo colegio se cierra a las 2 de la tarde, y a partir de ahí que los niñós se busquen la vida, y los padres a ver como lo hacen para convalidar vida laboral con familiar, solución, niños a la calle.
Patético es ver a todos los niños canarios a las 2 de la tarde reunidos planificando que hacer, mientras te das una vuelta por los colegios y los ves todos cerrados, cuando en nuestros tiempos siempre estaban jugando al futbol, organizando algo que supusiese motivación positiva hacia el niño.
Y para colmo de los colmos, si ese niño es un TDAH, ya supone un problema añadido, por lo que el resultado fácil es obligar al niño a ir al cole, pues de boca son muy buenos, para que en cuanto un TDAH actúe como todo educador de un país civilizado sabe ( y todo educador canario debería saber), pues expulsarle del cole, humillarse a él y a toda su familia, y si se te ocurre hablar con menores, te dicen que eso es cuestión de educación, realmente patético que los educadores no sepan que tienen al menos 5 genes diferentes, que la corteza cerebral es más fina, que el núcleo caudado es asimetrico, que no segregan dopamina, que no segregan noradrenalina... A perdon, que ni siquiera saben que es TDAH, que para ellos siempre ha sido un niños, DESINQUIETO... LO DICHO, EL SISTEMA EDUCATIVO CANARIO ES REALMENTE PATÉTICO Y TERCERMUNDISTA.
Y patético es hablar con el consejero de educación, pedirle que todos los profesores debería tener un curso de transtornos como el TDAH, bipolar, Asperger... y que nos diga que es que a los profesores no se les puede obligar a recibir un curso. Y luego ellos son los que expulsan a nuestros hijos enfermos y luego humillan a sus familias.
Y patético es hablar con el consejero de educación, pedirle que todos los profesores debería tener un curso de transtornos como el TDAH, bipolar, Asperger... y que nos diga que es que a los profesores no se les puede obligar a recibir un curso. Y luego ellos son los que expulsan a nuestros hijos enfermos y luego humillan a sus familias.
Una mujer denuncia que un instituto expulsó a su hijo porque es hiperactivo
La Fiscalía del Menor ha incoado un expediente de riesgo e investiga los hechos para saber si se ha dado un trato discriminatorio
BORJA VALCARCE
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA
Una mujer denuncia que el Instituto de Enseñanza Secundaria de La Isleta ha expulsado a su hijo de 16 años por ser hiperactivo. La madre del menor, Sonia R. de L., entiende que al echarlo del centro "se ha vulnerado la dignidad de su hijo" y se lo ha "discriminado por la patología que padece", un trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) para el que necesita medicación diaria. La Fiscalía del Menor ya ha incoado un expediente de riesgo para comprobar si los hechos denunciados son veraces.
El hijo de Sonia fue expulsado del instituto de La Isleta el pasado 27 de marzo después de que lo encontrasen el día 2 de ese mismo mes "fumándose un cigarrillo en la hora del recreo en las canchas del centro", expone la orden de expulsión. Cinco días después, el director del centro le abrió un expediente disciplinario en el que también se le acusaba de "ausentarse del aula sin permiso", "mantener una actitud desafiante y violenta contra los miembros de la comunidad educativa y de proferir insultos y amenazar públicamente a un profesor".
La demanda presentada por la madre del menor, bajo el asesoramiento del despacho Coello Abogados, argumenta que el procedimiento administrativo, iniciado y culminado contra su hijo en menos de un mes, ha sido realizado "bajo una serie de infracciones procedimentales" que impiden el adecuado "derecho de defensa" del menor ante la Administración y que "vulneran su derecho a la educación". De entre ellos, sobresale que "no se le notificó nunca el expediente al alumno y a su padre", que "no se acreditaron los hechos con informes de profesores" o que "no se trató de acudir a un procedimiento específico de conciliación" para evitar la expulsión del menor.
El problema de fondo, destaca la denuncia, es que "se ha vulnerado la dignidad del alumno por la mera circunstancia de padecer TDAH y, en definitiva, ser 'un estorbo', por lo que el centro ha orquestado un procedimiento administrativo para conseguir la expulsión del alumno". Además, le recrimina no haber "hecho ni el más mínimo esfuerzo en favorecer al menor, en integrarlo y en desarrollar medidas de mejoramiento de conductas, sino que simplemente lo han expulsado por realizar conductas que, a mayor inri, son manifestaciones típicas de la patología".
La demanda acaba critican-do la educación pública, resaltando que, al no poder "dar al menor lo que necesita, lo manda a la calle".
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA
Una mujer denuncia que el Instituto de Enseñanza Secundaria de La Isleta ha expulsado a su hijo de 16 años por ser hiperactivo. La madre del menor, Sonia R. de L., entiende que al echarlo del centro "se ha vulnerado la dignidad de su hijo" y se lo ha "discriminado por la patología que padece", un trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) para el que necesita medicación diaria. La Fiscalía del Menor ya ha incoado un expediente de riesgo para comprobar si los hechos denunciados son veraces.
El hijo de Sonia fue expulsado del instituto de La Isleta el pasado 27 de marzo después de que lo encontrasen el día 2 de ese mismo mes "fumándose un cigarrillo en la hora del recreo en las canchas del centro", expone la orden de expulsión. Cinco días después, el director del centro le abrió un expediente disciplinario en el que también se le acusaba de "ausentarse del aula sin permiso", "mantener una actitud desafiante y violenta contra los miembros de la comunidad educativa y de proferir insultos y amenazar públicamente a un profesor".
La demanda presentada por la madre del menor, bajo el asesoramiento del despacho Coello Abogados, argumenta que el procedimiento administrativo, iniciado y culminado contra su hijo en menos de un mes, ha sido realizado "bajo una serie de infracciones procedimentales" que impiden el adecuado "derecho de defensa" del menor ante la Administración y que "vulneran su derecho a la educación". De entre ellos, sobresale que "no se le notificó nunca el expediente al alumno y a su padre", que "no se acreditaron los hechos con informes de profesores" o que "no se trató de acudir a un procedimiento específico de conciliación" para evitar la expulsión del menor.
El problema de fondo, destaca la denuncia, es que "se ha vulnerado la dignidad del alumno por la mera circunstancia de padecer TDAH y, en definitiva, ser 'un estorbo', por lo que el centro ha orquestado un procedimiento administrativo para conseguir la expulsión del alumno". Además, le recrimina no haber "hecho ni el más mínimo esfuerzo en favorecer al menor, en integrarlo y en desarrollar medidas de mejoramiento de conductas, sino que simplemente lo han expulsado por realizar conductas que, a mayor inri, son manifestaciones típicas de la patología".
La demanda acaba critican-do la educación pública, resaltando que, al no poder "dar al menor lo que necesita, lo manda a la calle".
En Argentina ni siquiera saben que es el TDAH.
ResponderEliminarLos chicos con este trastorno son fácil y rápidamente etiquetados como "niños problema" y que el padre se arregle.
A mi hijo lo echaron del colegio en 1er grado (6 años). Todo porque la maestra estaba "sobrepasada" y no sabia como tratarlo.
El sistema educativo PÚBLICO de Argentina...